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| "Libro Aire" Amaranta Caballero Prado |
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| "Un minuto de deconstrucción" Performance Miguel Angel Iñíguez. |
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| "Libro A" Roberto Romero Molina |
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| "Libro Isla" Claudia Ramírez Martínez |
Un producto nunca habla de una persona, siempre es un trabajo de muchos, sin embargo nuestra firma aparece aquí por que somos el recipiente donde se trabajaron varias ideas. El crédito entonces es para el procesador de esas ideas, para quien asimila sus nutrientes. Por que el pensamiento no nos pertenece, sólo transita a través del cuerpo. Una manera de darle el paso, son los productos que comunican con otros, que nos permiten el diálogo, acaso verbal, quizás corporal, seguramente en el universo mental, conversamos de todas formas, cómo quiera que sea, deseo que el pensamiento en su viaje autónomo, crezca, se fortifique y nos siga alimentando.
Agradezco a mis compañeros, por ese primer diálogo que tuvimos después de mostrarnos y hablar de cada uno de estos libros objeto, a Miguel Angel Iñiguez, experto encuadernador que asesoró y sugirió maneras de presentación, solidario como siempre en el trabajo, a Roberto Romero Molina por su capacidad de síntesis, por compartir su energía, a Amaranta Caballero Prado, por que a ojo de pájaro supo identificar en las formas los contenidos afines, a descartar la paja, acercarme información, acompañar el proceso, a Selva Hernández por su curso de Tipográfía experimental, a Rene Castillo junto a él a Felius a César Vásquez y Jonathan por el espacio en la galería NODO.
Hoy que presento el libro “Isla” me alegra hacerlo como parte de un archipiélago en compañía del libro “un minuto de deconstrucción” ,“El libro A” y “El libro del aire” por que un producto nunca está sólo, surge entrelazado de pensamientos que subieron al mismo transporte y observaron por distintas ventanas lo diferente y lo igual.
Hoy que presento el libro “Isla” me alegra hacerlo como parte de un archipiélago en compañía del libro “un minuto de deconstrucción” ,“El libro A” y “El libro del aire” por que un producto nunca está sólo, surge entrelazado de pensamientos que subieron al mismo transporte y observaron por distintas ventanas lo diferente y lo igual.
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 Retratos hablados |
| Instalación |
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| Tintas al aceite, acrílico, corchos, olotes de maíz y luz. |
Transubstancia
Me interesa el proceso que sucede dentro de la barrica, luminoso en el sentido de la magia que se procesa dentro de ella. Convierte la uva en una substancia diferente, trabajando en conjunto con todos los factores que intervienen para ello, el tipo de madera utilizada, la temperatura, el reposo y sobre todo: la oscuridad.
Es por ello que sugiero que mi barrica sea presentada en la penumbra, aludiendo a la cava donde habita por meses. La barrica se ha perforado y es transformada en un contenedor de luz, evidenciando el proceso que no vemos. La perforación como un traspasar la mirada superficial, los círculos, ojos proyectando luz.
Corchos y olotes de maíz comparten espacio en el barril, representando la versión mexicana de elaborar el vino, fenómeno que es muy bien representado en el Valle de Guadalupe. A manera de tapón los corchos proponen la parte interactiva con el espectador que al quitarlos, permiten la fuga de la luz que contiene, al ponerlos de nuevo, la resguardan.
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| Proceso |
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visita a los viñedos  |
